Santa Ana / Museo Naval |
A finales del siglo XVIII, España se había colocado al lado
de Francia, hecho que serviría de señal del gran desastre de Trafalgar. Se aportó por el perdedor
Horacio Nelsón, ya se
conocía antes de Trafalgar que, todas las costas españolas habían
sufrido sus correrías. En un
grabado de 1802 aparece retratado rodeado de 26 navíos de línea, que capturó entre 1793 y
1801, entre ellos Salvador del Mundo, luego llamado por los ingleses HMS Salvador,
el San Isidro y el San Nicolás. Los dos primeros portaban 120 cañones cada uno
y los segundos 80. En este mismo grabado aparece una representación artística y algo exagerada del combate del Cabo de San Vicente donde
estos cuatro barcos fueron apresados por el marino inglés
El reglamento de presas de la Royal Navy establecía que
el capitán que capturase una presa le
correspondería dos octavos del valor de venta del buque capturado. Si Hubiera
un almirante al mando de la escuadra a él le correspondería un tercio de los
percibidos por el captor
Los barcos capturados fueron reparados, y en contra de lo que
solía suceder en estas ocasiones, la Armada Real los compró, sin duda dando
buenos dividendos a los captores, y seguramente
apreciando la buena construcción de estos buques
Al incorporarlos a las listas inglesas, tres de ellos
mantuvieron el hombre original, cosa inusual, sobre todo cuando llevaban nombre
de un santo, al que le quitaban el san el destino de estos barcos ferrolanos
fue diverso y el San Isidro y el Salvador fueron desguazados en 1814 y 1915. El
San Josef tuvo una vida más larga, uno de sus diversos cometidos fue ser
Escuela de Artilleros Navales. Se desguazo en 1849
Trafalgar - Auguste Mayer |
Trafalgar
En total de 60 navíos de línea repartidos entre la
flota de las Marinas; Real Británica con 27, Imperial Francesa con 18 y la
Española con 15 tomaron parte el 21 de
octubre de 1805 de la más importante
batalla naval del siglo XIX, frente a las costas del Cabo de Trafalgar, en los
Caños de Meca, en el municipio de Vejer de la Frontera, cerca del estrecho de
Gibraltar.
SE ha considerado como una de las batallas más importantes
del siglo XIX. En ella se enfrentaron los aliados Francia y España, al mando
del Vicealmirante Pierre Villeneuve, francés y Federico Gravina por parte
española contra la armada británica al mando de Horatio Nelson quien obtuvo la victoria. Hoy Trafalgar
Squaren, Plaza de Trafalgar, es una
plaza del centro de Londres, que se construyo para conmemorar la victoria.
Continuamente se subastan enseres que tuvieron que ver con Nelson, un mechón de su cabello, su
espada, su cinturón, su reloj, un trozo de su bandera y una carta en la que
expresa su deseo de aniquilar a los
franceses en Trafalgar, entre
otros
Los acontecimientos que precedieron a esta batalla se
encuentran en el intento frustrado por parte de Napoleón de invadir las islas
Británicas, la escuadra franco-española
debía de distraer a la flota británica y alejarla del Canal de la Mancha, para
dirigirla hacia sus posesiones en las Indias Occidentales. Este plan de distracción
fracasó y se vio agravado con la
derrota de Finisterre. Tras esta
derrota, la flota se dirigió al Puerto de Cádiz de donde zarparía hacia
Trafalgar
La flota franco española se vio bloqueada en Cádiz por
Nelson, Napoleón ordeno a Villeneuve navegar a Nápoles para despejar el
Mediterráneo del hostigamiento de los
buques ingleses, este no obedeció la orden hasta que conociendo que Napoleón
tenía intenciones de sustituirle y
pedirle cuentas de sus acciones se adelanto a la llegada de su reemplazo y
partió de Cádiz con una flota combinada de
34 buques encontrándose con Nelson cerca del cabo de Trafalgar, donde el
21 de octubre tuvo lugar el mayor combate naval de la historia. La flota
Franco-española fue abrumadoramente derrotada por la superioridad técnica y
táctica de la Armada Real Inglesa. Nelson cayó herido de muerte convirtiéndose
en uno de los más grandes Héroes de
guerra de Gran Bretaña.
Refiriéndonos a la flota española diremos que el estado de
los buques era lamentable al extremo que
algunos capitanes habían sufragado de su bolsillo las reparaciones y pintura de
sus barcos con la intención de no quedar deshonrados ante los capitanes
franceses. El Marqués de la Ensenada consiguió modernizar nuestra vieja marina
y aumentar su prestigio que estaba en vías de deterioro, también amplio los
astilleros de Cádiz, Cartagena, Ferrol y la Habana, de donde salieron algunos
de los barcos que intervinieron en Trafalgar, aun así no estaba en condiciones
de sostener un combate a gran escala contra la más moderna de las flotas
Con respecto a los tripulantes, muchos de ellos tuvieron que ser reclutados con premura, eran de distintos orígenes, mendigos, campesinos, soldados de infantería, hasta reclusos pues la epidemia de fiebre amarilla que había atacado a Andalucía entre 1802 y 1804 dejo a la flota española sin tripulantes
El General Mazarredo Comento “llenamos los buques de una
porción de ancianos, achacosos enfermos e inútiles para el mar
Los mandos que dirigieron nuestra armada:
Teniente General Federico Gravina y Nápoli – Jefe de Escuadra
Ignacio María de Álava - Jefe de Escuadra Baltasar Hidalgo de Cisneros –
Brigadier Cosme Damián de Churruca- Brigadier Dionisio Alcalá Galiano – Mayor
General Cayetano Valdés – Mayor General Antonio de Escaño – Capitán Francisco
Alcedo y Bustamante – Capitán General Francisco Javier de Uriarte y Borja
Villeneuve y su buque insignia, el Bucentaure, resultaron
capturados por los ingleses junto con otros muchos buques españoles y
franceses. El almirante español Gravina
se escapó con parte de la flota, pero sucumbió
por las heridas sufridas en la batalla
Siete navíos de línea construidos en los astilleros de Ferrol
participaron en Trafalgar, 6 en la flota española y uno en la francesa
SE denominaban navíos de línea por la formación que adoptaban a la hora del combate, uno detrás de otro formando una cortina de fuego contra el enemigo. Eran buques de tres palos con vela cuadrada, y de dos o tres cubiertas y un máximo de 120 cañones. Hubo una excepción, el español Santísima Trinidad con cuatro cubiertas y 140 cañones, que fue hundido al sur de Cádiz mientras era remolcado por los ingleses, después de la batalla, a Gibraltar
SE denominaban navíos de línea por la formación que adoptaban a la hora del combate, uno detrás de otro formando una cortina de fuego contra el enemigo. Eran buques de tres palos con vela cuadrada, y de dos o tres cubiertas y un máximo de 120 cañones. Hubo una excepción, el español Santísima Trinidad con cuatro cubiertas y 140 cañones, que fue hundido al sur de Cádiz mientras era remolcado por los ingleses, después de la batalla, a Gibraltar
Navíos de línea ferrolanos:
Un primer tipo, los Meregildos o serie Santa Ana, navíos de tres
puentes y 112 cañones construidos con planos de Romero Landa, eran el Conde de
Regla, Salvador del Mundo, Real Carlos
San Hermenegildo, Reina
María Luisa y Príncipe de Asturias, además del Santa Ana, que sirvió de prototipo, construidos
en los astilleros de Ferrol y La Habana
El Santa Ana construido y botado en 1784 en
Ferrol, estaba al mando del capitán de navío José de Gardoqui, y de una tripulación de 1102
hombres murieron 97 y 141
fueron heridos. El buque fue desarbolado en la contienda y apresado por los
ingleses, siendo liberado finalmente por el Montañés y remolcado a Cádiz por la
fragata francesa Tethis
Un segundo tipo formado por los buques de la clase de los
ildefonsinos, construidos siguiendo planos de Romero Lannda. Se trataba de
navíos que cargaban 74 cañones
repartidos en dos cubiertas, fueron los navíos San Leandro, L¨Intrépide y
Monarca
San Leandro tiene una dimensiones más reducidas y solo
portaba 64 cañones, construido en Ferrol y botado en 1787. En la batalla de
Trafalgar estaba bajo el mando del capitán José Quevedo, siendo desarbolado en
el combate, entro en Cádiz y de los 607 hombres que formaban su
tripulación 8 fueron muertos y 22
heridos
El Intrépido fue construido y botado en Ferrol,
en 1801 se transfirió a la Marina Francesa
de Napoleón en unión de los navíos San Genaro, Atlante, San Antonio,
Conquistador y el Infante D. Pelayo, fue renombrado como L´intrépide
Sus bajas en la batalla de Trafalgar fueron 320 muertos y 289
heridos o prisioneros de sus 643 hombres
solo sobrevivieron 17 hombres
El Monarca Construido botado en Ferrol el 1794, su tripulación 672
hombres, el bloqueo británico hizo que
regresara a Ferrol, encontrándose en la ría en el momento del ataque inglés de
1800. Estgaba al mando del capitán Teodoro Argumosa, que resulto herido en
compañía de otros 150 hombres, 100 resultaron muertos. Fue apresado por una dotación de marinos británicos del
Bellorophon, pero en la noche, los supervivientes marineros españoles cortaron
los palos de las velas y los tiraron por la borda, quedando a la deriva y a
merced del temporal que sobrevino después del combate
Intentando regresar a Cádiz naufragó en la costa de Arenas
Gordas quedando tumbado sobre el costado. Siendo incendiado más tarde por la
fragata británica Naid para evitar fuera
nueva ente utilizado
El tercer tipo de navíos
de línea construidos en Ferrol y
que participó en la Batalla de Trafalgar fue de la clase Montañés, contaban con
80 cañones distribuidos en dos cubiertas y basados en planos de Romero Landa,
notablemente mejorados por Julián de Retamosa, los de esta serie que
participaron en la Batalla fueron: el Montañéx, Neptuno y Argonauta
Montañés construido en la ría del Ferrol, así
llamado por haber sido sufragado por una
suscripción del bigadier José de Bustamante y Guerra entre sus paisanos
cántabros emigrantes a la provincia española de Monteviedeo
Fue botado en 1794, era rápido y su armamento era de 74
cañones, Su obra viva estaba forrada cor unas 2.400 planchas de cobre
Sus dos comandantes en la batalla de Trafalgar fueron
Francisco Alcedo y Antonio Castaños que
causaron baja en el combate, tomando el mando el teniente de navío Joaquín
Gutiérrez. Resultaron muertos 20 hombres y 29 heridos de los 749 que formaban
su tripulación. Consiguió rescatar a los
navíos Santa Ana y Neptuno que habían sido capturados por la flota
inglesa. Regreso a Cádiz en octubre de 1805
Neptuno, botado en Ferrol en 1795 nombre que
honra al dios del mar y que era el tercer barco denominado con ese nombre
siendo además uno de los primeros buques en tallar su mascarón de proa con
figuras referentes a su nombre
Bajo el mando de
Cayetano Valdés, herido de gravedad en el combate. Resultando heridos otros 47
tripulantes y muertos 42, la tripulación estaba formada por 797 hombres. Fue
apresado por los ingleses, pero rescatado por el Montañés
El temporal que sucedió a la batalla lo arrastró hacia la costa hundiéndose en las cercanías
del Castillo de Santa Catalina de Alcanatif
Resulta curioso que en esta batalla se enfrentaron tres buques con la denominación
del dios del mar, Neptuno español, Neptune inglés y francés
El Argonauta, último navío de línea construido en
España en Ferrol 1798, era gemelo con Neptuno.
Su tripulación durante la batalla de Trafalgar fue de 800 hombres, capitaneado por
Antonio Ppareja, sus bajas fueron de 100 muertos y 200 heridos.
La flota inglesa lo capturo y lo hundió incendiándolo para evitar su represa
Este era uno de los buques que se encontraba en la Ría del
Ferrol el día del ataque inglés
La flota Española anclada en Cádiz estaba compuesta
por 15 navíos
La francesa considerada la segunda de importancia en su época constaba de 18 navíos potentes y modernos pero el cuerpo de oficiales había recaído en marinos inexpertos que sustituían a los antiguos mandos, que habían sido ajusticiados durante el proceso revolucionario debido a su origen aristocrático
La flota británica estaba formada por marineros
profesionales con experiencia tanto en el mar como en el combate y mandada por
un almirante convertido en una leyenda
por méritos propios, contaba con 27 navíos
La batalla de Trafalgar
comienza a medio día con un cañonazo sobre uno de los navíos ingleses, la
escuadra franco-española estaba dispuesta en forma de arco
Existe un proyecto internacional para la búsqueda, en aguas
del Golfo de Cádiz, de los navíos que se hundieron en la batalla naval que
cambió el rumbo de la Historia
Parece que junto a la
Reserva de Doñana un equipo de la Universidad de Huelva asegura haber
descubierto el pecio del Rayo, aunque
otras fuentes sostienen que también podría ser el Monarca o el Berwick perdidos
en la misma zona
Entre los pecios que se han localizado se cree que dos
pertenecen a la flota francesa, serian el Bucentaure, barco de Villeneuve y el
Fogueux, también se sigue la pista del Santísima Trinidad, buque de guerra
español, el más grande de su tiempo, hundido por los británicos al no poder
remolcarlo a Gibraltar. Este Fue un
gigante de 130 cañones apodado por Benito Pérez Galdós “El Escorial de los
Mares”
El deseo de localizar y recuperar estos barcos sigue latente.
Quizás algún día alguien pueda rescatarlos de su sepulcro marino
Fuimos una gran potencia, poco a poco fuimos perdiendo y lo que es peor,
seguimos perdiendo. Lamentablemente para muchos se ha perdido incluso el
aprecio y el respeto hacia la tierra que nos vio nacer y por la que tantos
dieron su sangre y su vida y sintieron el orgullo de su patria, y sus símbolos,
sin vergüenza alguna y sin que nadie les propiciara un insulto, fueron en su
momento hombres alabados, hoy para muchos olvidados
fuentes: ABC ,La voz Digital, La Voz de Galicia, Trafalgar A. Mayer, Wikimedia
HSM VICTORY en la Era de Vicen
No hay comentarios:
Publicar un comentario